¿De qué sirve tipificar el feminicidio?
Rosa Elvira fue hallada en el Parque Nacional el 24 de mayo de 2012, luego de ser torturada, violada y empalada por un compañero de colegio, Javier Velasco. Su agresor ahora está condenado a 48 años de cárcel por los delitos de homicidio agravado, tortura agravada y acceso carnal violento agravado. Su caso impulsó el desarrollo de la Ley 1761 de 2015, que lleva su nombre, y que tipifica el feminicidio.
La ley llegó tarde a Colombia. Antes, ya México había tipificado este tipo de delito. Fue Marcela Lagarde, exdiputada del Congreso Federal, quien lo definió como el asesinato de una mujer por el hecho de pertenecer a ese sexo, con el agravante de que el Estado no había sido eficaz en garantizarle condiciones seguras de vida.
Basado en ello se hizo la Ley Colombiana, en la que además se agrava el delito si hay como precedente el maltrato, la tortura, los crímenes sexuales, la violencia doméstica, entre otros. Estos actos habrían sido permitidos o no prevenidos por el Estado antes de la muerte de la víctima.
La Ley pretende que los acusados no apelen a la “ira y el intenso dolor” para disminuir las consecuencias de sus actos como pasaba anteriormente.
La nueva tipificación también evita que el homicidio a una mujer por el hecho de ser mujer no sólo sea visto como una conducta que va más allá de la violencia intrafamiliar. Anteriormente, no se agravaba la conducta si el acusado no tenía vínculos con la víctima.
A pesar de que la ley incluye la cátedra de género, capacitación para las personas en el aparato judicial, observatorios, varios funcionarios de la Fiscalía y la Rama Judicial no están capacitados para juzgar en estos casos. Dicha situación quedó evidenciada en la entrevista que El Espectador le hace a Liliana Bernal, la jueza del caso de Yuliana Samboní.
Varios de sus compañeros le advertían que eso no era un feminicidio, sino un homicidio agravado con acceso carnal. “Empecé a reconocer mi propia ignorancia y la de mis compañeros”, dijo al diario Bernal.
Gracias a que ella interpretó la norma, el pronunciamiento de la constitucionalidad de la ley Rosa Elvira Cely y una sentencia de la Corte Suprema de Justicia, hoy Rafael Uribe Noguera está condenado a 58 años de cárcel.
A este caso le ayudó la presión mediática y social, al igual que la fortaleza de la juez. Sin embargo, ¿cuántos feminicidios se están quedando por fuera de las cifras por el miedo o desconocimiento de jueces y fiscales que no tipifican, acusan o juzgan? En lo que va corrido del año ha habido 150 feminicidios y tan solo se han condenado 5, según datos de la Fiscalía General de la Nación.
Sin embargo, el feminicidio, o la tentativa de feminicidio, es la última instancia a la que llega la violencia contra la mujer. Antes de este acto violento ha habido una serie de violencias más sutiles y que muchas veces son ignoradas. Esto lo demuestra la encuesta que realizamos en Datasketch, basado en el proyecto Argentina Cuenta La Violencia Machista, en el que se miden 15 dimensiones diferentes de violencia contra las mujeres. Los resultados de la encuesta se pueden ver aquí
Todas estas violencias han intentado ser abordadas con diferentes legislaciones a nivel nacional y con campañas y medidas de protección o prevención a nivel mundial. Para conocerlas, puedes explorar la siguiente línea de tiempo: